el hotel es una joyita, a dos pasos del mar, y las vistas son simplemente espectaculares. el personal, en especial alba, es super amable y te da tips geniales de lugares para visitar. además, la habitación es muy acogedora y tiene una temp súper agradable gracias a la galería. dormir con el sonido de las olas es una experiencia increíble. definitivamente, quiero volver a este lugar tan chill.

el desayuno podría tener un poco más de variedad y el baño necesitaba un poquito de cariño.

Ubicación excepcional
Vistas espectaculares
Personal encantador

Desayuno algo limitado
Baño requería atención

La amabilidad de Alba al recibirnos y el desayuno con repostería casera hicieron que nuestra estancia fuera inolvidable. Admirar las vistas al mar desde el balcón fue un regalo cada mañana.

Insisto, este lugar es super recomendado for una visita momentánea

Increíble habitación, increíble desayuno, con una nevera pequeña y un baño de buen tamaño que hizo que nuestra estancia fuera muy cómoda y agradable. Además, la ubicación es perfecta para explorar la ciudad y el acceso a la playa está a solo unos pasos, mientras que el aparcamiento fue muy conveniente durante nuestra visita.

No he tenido ningún problema.

accesible a hermosos paseos y vistas costeras

mi estancia fue maravillosa, disfruté de las espectaculares vistas al mar y la cercanía a la playa de Rodeira, así como de la atención dedicada por parte del personal que siempre estuvo listo para ofrecernos recomendaciones sobre lugares para explorar como el mirador "Balcon do Rei", que está a solo un agradable paseo de menos de 20 minutos desde el hotel, pero la variedad en el desayuno podría mejorar. De verdad, la ría de Vigo y sus alrededores son impresionantes.

El lugar es increíble, especialmente para mi bebé. Nos encantó la tranquilidad y las vistas al mar. Dormimos con el sonido de las olas, ¡increíble! El personal fue muy acogedor y la habitación era perfecta para nuestra familia.

A mis hijos les habría encantado un poco más de variedad en el desayuno.

frente a la playa, la vista al mar es espectacular y el ambiente es súper tranquilo. el personal es muy amable, siempre dispuesto a ayudar. el desayuno es genial, con opciones caseras que te dejan con ganas de más.

algunas sillas ya estaban un poco desgastadas 🤔.

Las vistas al mar desde la habitación son espectaculares, y la atención del personal es excepcional. Sin embargo, el desayuno podría tener más opciones saladas, y la puerta del baño no cerraba bien. A pesar de ello, es un lugar acogedor y perfecto para disfrutar de la tranquilidad.

Wifi rápido y acceso a la playa a solo tres metros. Algo ruidoso por la noche.

las vistas del mar son espectaculares y el personal es increíblemente amable. el desayuno podría tener más opciones saladas.

La habitación tenía una vista al mar que rivalizaba con cualquier postal. Podía disfrutar de una brisa marina en el balcón mientras saboreaba un café por la mañana, casi como si estuviera en un anuncio de vacaciones. Además, el acceso directo a la playa fue como encontrar el tesoro para un pirata en un día aburrido.

Poca variedad en el desayuno

El hotel tiene una ubicación inmejorable, a solo tres metros de la playa. Las vistas desde la habitación son impresionantes, pero el cartel de "Hotel" obstruía un poco la vista al mar. La habitación era amplia, con una cama muy cómoda y un baño bien equipado. La tranquilidad del lugar es perfecta para desconectar. El personal es extremadamente amable. siempre listos para ayudar y ofrecer recomendaciones sobre lugares para visitar. Sin embargo, la variedad en el desayuno podría mejorar. A pesar de contar con buena repostería casera, hubiese apreciado algo salado. En general, un sitio acogedor y para volver.

Vistas espectaculares y un ambiente tranquilo. La playa está a un paso y el personal siempre sonriente hace que te sientas como en casa.

El desayuno podría llevar más variedad, ¿o es que sólo los dulces hacen amistad?

Las pizzas gourmet de El Jabuguito son de otro mundo, ¡no se pueden perder! Además, el desayuno con repostería casera es todo un lujo, y la cama era comodísima, perfecta para descansar después de un día de exploración. Las vistas al mar son impresionantes, una verdadera joya.

El baño necesitaba un poco de cariño, pero ¿quién se preocupa de eso cuando puedes relajarte en el balcón disfrutando de la brisa marina? Aún con sus detallitos, sigue siendo un lugar fantástico.